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Rollitos de plátano maduro con queso de cabra


Una adaptación moderna de los piononos tradicionales

Este platillo tiene sus raíces en las cocinas de nuestras abuelas, donde se preparaban deliciosas empanaditas hechas de plátano maduro y rellenas de queso y frojilitos arreglados. El queso Chevre de cabra aporta una textura cremosa y un tono ligeramente cítrico que contrasta deliciosamente con el dulce del plátano maduro.


Ingredientes

3 plátanos dulces maduros

1 taza de queso Chevre de Monte Azul (queso suave de cabra)

1/4 taza de harina

1 cucharada de mantequilla

1 cucharada de miel de caña o de miel de abjeaj

1 cucharadita de vainilla

1/2 cucharadita de canela

1/8 cucharadita de clavo molido

1/2 cucharadita de cacao sin azúcar

1 taza de frijoles negros arreglados a su gusto

Aceite de coco o aceite vegetal


Preparación

Corta los plátanos sin pelar por la mitad y colócalos en una olla con agua y cocinar a fuego mediano hasta que estén blandos.

Escurrir los plátanos, quitarles la piel y triturar o majar con un tenendor para hacer un puré espeso.

En un tazón colocar el plátano y agregar el resto de los ingredientes menos los frijoles y el aceite, y mezclar suavemente sin batir.

Colocar sobre una superficie ligeramente aceitada la masa de plátanos en forma rectangular. Esto también se puede hacer sabre un plástico de cocina para facilitar el proceso de arrollar. Cubrir la base de plátano con una capa de los frijoles molidos.

Ahora, con cuidado, empezar desde un extremo a formar las capas en un rollito.

Cubrir el rollito con harina e introducir a un sartén caliente con el aceite y freir uniformemente, rotando el rollito mientras va tostando la superficie.

Cuando esté uniformemente tostado, sacar del sartén y dejar reposar sobre un pañito por unos minutos y cortar tajadas de 1.5 cm para servir.


Trabajando con las manos, tome 2 cucharadas del puro y conviértalo en una tortilla, agregue 1 cucharada de frijoles refritos y forme una bola. Cuando hayas terminado de hacer las bolas, amontona el aceite y fríe los piononos hasta que estén dorados, unos 2 o 3 minutos por cada lado. Ponlos a un lado sobre una toalla de papel y sírvelos calientes. * Si hornea, puede hornearlos a 350F durante 20 minutos.

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